POR QUÉ ES IMPORTANTE QUE NUESTROS HIJOS SE VISTAN SOLOS (MONTESSORI PASO A PASO)

Como veis, entre Satélites y astronautas, no nos olvidamos de nuestro propósito de acercar la filosofía Montessori (un poco a nuestra manera) a nuestra casa. 

Ya os hablaba de esta intención a raíz de unos libros maravillosos que me trajeron los Reyes Magos, y os conté cómo habíamos intentado ponerlo en práctica a través de las rutinas diarias, ya que habíamos visto que era lo más sencillo a la par que importante. 

Pero ¿por dónde empezamos? Si recordáis, en esta infografía veíamos que lo primero era seleccionar una rutina. Ya que tenemos bastante dominadas las rutinas del aseo personal en el baño, hemos decidido continuar por las rutinas relacionadas con vestirse o desvestirse. 

Ahora os cuento nuestros porqués más importantes (los top, obviamente hay más, pero ya os los iremos contando).

¿Por qué creemos que es importante que se vistan solos?

Por supuesto... desarrollan su autonomía:

Ya sabemos que en Montessori una de las cosas que se pretende es favorecer la autonomía para facilitar el aprendizaje... o el famoso "enséñame a hacerlo por mí mismo/sin tu ayuda". 

¿Os habéis parado a pensar en cuántas veces nos vestimos y nos desvestimos al día? Los adultos unas cuantas (dos o tres al menos...) pero ¿y los niños? ¿cuántas veces LES vestimos y/o desvestimos?

Que si quitamos el pijama, ropa de casa, se ensucia y hay que cambiar, se moja y hay que cambiar, tiene calor, tiene frío, salimos a la calle, volvemos a casa, otra vez pijama... sin contar con los cambios de pañal que también son unos cuantos... 

Entonces ¿por qué es importante que aprendan a vestirse solos? Si eres afín a esta pedagogía y tu respuesta se parece a: para ahorrar tiempo, para poder vestir al pequeño mientras, o para poder hacer otras cosas yo mientras... olvídate (o al menos olvídate de que sea un aprendizaje feliz). No hay nada más "desesperante" que dejar que un niño pequeñito se vista o se desvista solo (¿o no?), así que es muy probable que acabemos frustrados, enfadados y a gritos. 

Por experiencia propia hablo ya que de hecho... cuando me percaté de esta necesidad con S por primera vez mi objetivo era precisamente ese: que S (2 años en ese momento) se vistiera solo para que yo pudiera vestir a mi bebecito R y ahorrar algo de tiempo. Pero claro, esa era MI necesidad, no la de S, así que os podéis imaginar mi estrepitoso fracaso, aunque como veis, de los errores se aprende. 

S no necesitaba en esos momentos que yo "le exigiera que se vistiera solo" (porque en realidad es lo que estaba haciendo en ese momento), S necesitaba sentir que su mamá le seguía queriendo tanto como a su recién llegada hermanita y le seguía vistiendo y haciendo carantoñas en el cambiador. Una vez entendí esto decidí relajarme en este tema y fue en el momento en el que R empezó a tener interés por vestirse sola cuando S también empezó a tenerlo realmente (¿pronto... tarde? ¿para quién? ¿quién decide eso realmente?). 

Ahí con una mirada y una intención nuevas por mi parte, fue cuando comenzó a fluir este tema y a día de hoy S (3 años y medio) se viste y se desviste solo perfectamente (aunque hay veces que sigue mimosito y me pide que lo haga yo y yo, obviamente, NOS concedo ese momento de conexión). Así que, tranquilidad, que aunque penséis que "a este paso nunca se vestirá solo", sí, lo hará, pero en el momento adecuado (que no tiene por qué ser el de los adultos, para nuestra "desgracia"). 

Se ven capaces y fortalece su autoestima:

Pero ojo, que R no se queda atrás... la primera vez que la chiquilla tuvo intención de participar en esta rutina tenía 5 meses (sí, sí, de verdad, fue la primera vez que me dí cuenta de ello). Yo le decía "ahora un brazo..." y ella metía sola el brazo por la manga "y después el otro" y metía el otro (¿veis qué sencillo? Solo hay que observar). Incluso si tenía algo en las manos se lo cambiaba de mano para poder hacerlo ella y se enfadaba muchísimo cuando teníamos prisa y le metía yo los brazos por las mangas. 

Y he ahí otra razón por la que dejar que nuestros hijos se vistan solos ¡debe ser tremendamente desagradable que te vistan y desvistan como a un muñeco! De hecho... ¿cuántas "rabietas" se dan en esos momentos? Si observáis a vuestros peques, seguro que notáis cómo quieren participar de la rutina de vestirse, y si les damos la oportunidad, participan. Y más aún en esa etapa en la que es todo "yo, yo, yo"... aprovechemos ese momento en el que ellos tienen toda la intención de hacerlo por sí mismos para permitirles conseguirlo paso a paso, y lo mejor: observad su cara con cada pequeño logro. 

Y además... les empoderamos y les damos herramientas para la vida:

Otras razones bastante importantes son la "retirada" del pañal (soy de la opinión de que el pañal se deja, no se retira, y por tanto no podemos exigirles que utilicen el baño si ni siquiera son autónomos para ir y bajarse o subirse la ropa interior sin ayuda...) y... el empoderarles un poquito frente al tema de los abusos sexuales. 

Sí, así sin anestesia. Si nuestros hijos no dependen de nadie para vestirse o desvestirse, podrán hacerlo solos incluso cuando nosotros no estemos con ellos, intentando evitar (y recalco lo de intentando, por desgracia) que alguien con malas intenciones aproveche ese momento de vulnerabilidad para abusar de ellos de la forma que sea. 

Así que uno de los mensajes que pretendo que entiendan mis hijos con esta rutina es que su cuerpo es su tesoro y que es muy importante saber protegerlo. 

Así que...

Así que si os quedáis por aquí os iremos compartiendo cómo estamos acercando la filosofía Montessori a esta rutina que creemos que es tan importante, cómo hemos secuenciado la rutina, cómo la hacemos atractiva para los niños, trucos para que lo consigan, cómo ordenar la ropa para que puedan elegirla y cogerla sin ayuda... 

Como siempre... no se consigue de un día para otro, pero el primer paso es empezar y nosotros no podemos estar más contentos de ver cómo cada día perdemos menos la paciencia con este tema, ellos consiguen más y más logros y en casa se respira un poquito menos de tensión en esos momentos. 

¿Creéis que es importante la autonomía en esta rutina? ¿Os gustaría llevarla con un poquito más de paz? 

¡Acompañadnos en este aprendizaje! 

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