ENROSCAR Y DESENROSCAR (ACTIVIDADES DE VIDA PRÁCTICA MONTESSORI)

Cuando hablamos de las Actividades Montessori de Vida Práctica os comenté que después de observar a R y S y reflexionar sobre sus posibles intereses, sus necesidades y el Periodo Sensible en el que se encontraban, habíamos visto que un par de actividades que podían dar respuesta a todo eso eran los trasvases (para S) y enroscar y desenroscar tapas (para R).

De los trasvases ya hablamos aquí (1ª parte) y aquí (2ª parte), así que hoy quiero contaros cómo hemos planteado la actividad de Enroscar y Desenroscar.

¿Por qué hemos planteado esta actividad? ¿Qué necesidad/interés resuelve?

Esta actividad la hemos preparado principalmente para R, pero al igual que los trasvases (que eran para S pero R también quería hacerlos) hemos acabado preparando otra igual, en esta ocasión, para S. 

Él tiene dominadísimo lo de enroscar y desenroscar (porque desde pequeño le gustaba también practicarlo), pero como los dos están atravesando un momento muy intenso de "quiero lo que tenga mi herman@ y tiene que ser exactamente igual"... pues también había que responder a esta necesidad emocional ¿no?

Y es que la pequeña R se desvive porque le dejemos abrir y cerrar la tapa del café, o del Colacao, o de la mermelada, o los tapones de las botellas... y si no te das cuenta, o vas rápido y se te olvida ofrecérselo, o lo haces tú y se da cuenta... ¡no imagináis cómo se enfada!

Normalmente le dejamos hacerlo con estas cosas cotidianas sin problema, pero hay días en los que vamos con un poco de prisa y no podemos darle un tiempo de calidad para que lo intente tranquila (igual esto os suena...)

Así que, aunque siga abriendo en el desayuno la tapa del Colacao, decidimos darle este tiempo de calidad y de calma para continuar perfeccionando este movimiento a través de esta sencillísima actividad (que dicho sea de paso, está al alcance de todos).

Seguid leyendo para ver cómo la hemos presentado.

Enroscar y Desenroscar Paso a Paso:

Materiales:

En realidad, lo único que se necesita son:

• Botes de distintos tamaños, limpios y vacíos, con sus tapas de rosca (solo de rosca) correspondientes. Nosotros usamos botes de cristal de conservas, de mermelada, de legumbres... que hemos ido guardando para la actividad. 

Pero si aún queremos ir más allá en la aplicación Montessori, podemos buscar también:

• Una bandeja pequeña o cestita para presentar la actividad.
• Un mantelito individual o servilleta de tela grande que delimite la zona de trabajo, favoreciendo así la concentración del niñ@.

Presentación de la actividad:

El objetivo primero de esta actividad es simplemente practicar el movimiento de enroscar y desenroscar. Simple y llanamente. Así que esa será la primera fase de trabajo: que el niñ@ enrosque y desenrosque. 

Un solo bote y su tapa:

• Presentamos uno de los botes (e insisto, solo uno) en una bandeja o cestita, destapado pero con la tapa al lado. 
• Cogemos la tapa y la ponemos sobre la rosca del bote, llamando la atención del niño sobre el hecho de que encaja (yo digo: "encaja" o "sí", y la señalo)
• Después abrimos bien la mano, la mostramos al niñ@ y la ponemos sobre la tapa preparada para girar.
• Giramos la tapa llamando la atención de nuevo sobre la acción: "Gira, gira..."
• Cuando hayamos terminado de enroscarla, tiraremos de ella para intentar abrirla. Si la hemos enroscado bien, obviamente no se abrirá, así que podemos decir algo como "está cerrado". 

Para abrirlo es similar. Podemos enfatizar también la fuerza que hacemos al empezar a desenroscar así como la dirección de giro para abrir y cerrar. 

Cuando el niñ@ controle ese bote, podemos cambiarlo por otro de un tamaño distinto, pero solo los presentamos de uno en uno hasta que el movimiento de enroscar y desenroscar esté medianamente dominado. 

No nos olvidemos de presentar también la forma de sacar el material y la manera de recogerlo y guardarlo una vez que el niño haya acabado con la actividad.

Variantes, presentación y propuesta de orden para presentarlas:

Una vez dominado este movimiento de manera aislada (es decir, con un solo bote a la vez y su tapa correspondiente) podemos proponer al niñ@ variantes que enriquezcan la actividad y por tanto la experiencia, y que le permitan, por ejemplo, encontrar la tapa adecuada al tamaño de cada bote. El control del error de todas ellas es muy simple: o encaja la tapa o no encaja. 

El orden en el que nosotros hemos planteado las variantes en función de su dificultad, es el siguiente:

1. Dos botes contrastados (uno muy grande y otro muy pequeño) con sus tapas
correspondientes (aquí ya estamos proponiendo una discriminación
de tamaño que enfatizaremos al realizar la presentación de la actividad)

2. Tres botes (grande, mediano, pequeño) con sus tapas correspondientes.

3. Un solo bote y las tapas de todos los botes de entre las que
el niñ@ tendrá que encontrar la correcta.

4. Un solo bote y muchas tapas, de rosca y no de rosca (lo que
añade un paso más en la dificultad: discriminar entre
diferentes tipos de tapas).

¡Atención! Esto no es una carrera, hay que seguir el ritmo del niñ@, no hay que presentar todas estas variantes en un mes o en una semana, sino ver si el niñ@ sigue mostrando interés por la actividad y pide más... o no. A lo mejor la actividad pierde interés y podemos guardarla y volverla a sacar en un tiempo. 

Conclusión y nuestra experiencia:

Al igual que los trasvases, esta actividad tan aparentemente "simple" permite al niñ@ desarrollar la motricidad fina, la concentración, la coordinación óculo-manual, la precisión, la discriminación por tamaños o características comunes/diferentes, la autonomía, la lateralidad... Entre otras...

Y lo mejor de todo: a través de algo que le interesa y le atrae, que le va a ser útil en su vida diaria y en un ambiente de calma y que respeta sus ritmos... ¿se puede pedir más?

Yo, de verdad, veo la carita de satisfacción de R cuando va realizando sus logros, cuando consigue enroscar la tapa, o hacer fuerza suficiente para desenroscarla, o acertar con el tamaño... ¡y tengo que contenerme muchísimo para no hacerle una fiesta! De hecho a veces se aplaude ella sola cuando lo consigue... y no puedo evitar seguirle el rollo...

Es precioso verles trabajar con sus materiales, de verdad, probad con esta actividad que es tan sencilla y merece tanto la pena... no os lo perdáis!!

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